Se suele creer que el pensamiento positivo ayuda a llevar una vida más feliz. De pequeños nos decían que sonriéramos y que pusiéramos cara de estar contentos. De mayores nos dicen que miremos el lado positivo, que no hay mal que por bien no venga y que el vaso está medio lleno. A veces la realidad irrumpe y te impide comportarte como si fueras feliz...
La salud te puede fallar, tu pareja te puede engañar, tus amigos pueden defraudarte... En esos momentos sólo quieres aceptar la realidad, olvidar las apariencias y ser tú mismo, asustado e infeliz.
¿Qué quieres ser en la vida?... Feliz.
Pero quizás sea esa expectativa lo que nos impide llegar a serlo, quizás cuánto más intentemos obligarnos a ser felices, más confundidos estemos... hasta que no nos reconocemos...
En vez de eso, seguimos sonriendo e intentamos ser esas personas felices que quisiéramos ser, hasta que nos damos cuenta de que lo hemos tenido delante, ni en nuestros sueños ni en nuestras esperanzas, sino en lo que nos hace sentir cómodos; en lo que conocemos.
22.04.86 ese fue el día... 15.30h fue el momento elegido para que todo el conjunto de casualidades acumuladas a lo largo de los años explosionasen en un suceso único e irrepetible. Aquel llanto y su mirada me hicieron pensar a cerca de lo que somos, me hizo asomarme vertiginosamente a la inmensidad de la vida...
Es increíble pensar que tu historia, y la mía; se remontan a miles de millones de años atrás... mucho antes de los tatara tatara tatarabuelos de tus bisabuelos... Si no hubiese sido por ellos tú no estarías aquí ahora mismo. La vida es un conjunto de casualidades... Una cadena de sucesos unidos por el azar... El hecho de que ninguno de esos eslabones se haya soltado en el camino resulta casi impensable. Tus antepasados sobrevivieron a cada una de las adversidades con la que la vida les sorprendió, haciendo posible tu existencia.
Nacer es cómo jugar a la lotería... La estadística te dice que es poco probable que vayas a ser tú el elegido entre miles de millones de sujetos en potencia, prácticamente imposible... Y sin embargo, aquí estas, con tu vida, con tu historia, con tu obra de teatro por la que vas medio perdido, consciente de que casi sin darte cuenta el telón se habrá bajado para siempre.
Por eso, porque el telón va bajando sin cesar debes disfrutar cada momento, saborear la vida y comerte hasta el último bocado... Tú y sólo tú eres el responsable de que el azar esté de tu parte, eres quién decide cómo afrontar cada reto que este gran juego llamado vida te plantea... Sabes que tarde o temprano en tu pantalla pondrá "game over"... Por eso, no te preocupes demasiado por tonterías, las mejores cosas son aquellas que suceden casi sin darte cuenta... esas que pasan mientras tú estás perdiendo el tiempo en preocupaciones aún sabiendo que todo, sea bueno o malo, pasará, y por eso nada tiene tanta importancia como piensas.
Lloramos cuándo algo es triste, también derramamos algunas lagrimas cuando algo es muy bonito. Reímos cuándo algo es divertido o feo... Nos ponemos tristes cuándo algo es bonito porque sabemos que no va a durar para siempre... Y a fin de cuentas, esa es la magia que da sentido a todo.
Piensa en la suerte que tienes de haber nacido... Haz de tu historia un best seller
